Frankfurt es una ciudad perfectamente asequible en un fin de semana. Además, desde varios rincones de España vuela Ryanair (lo que es un plus para viajar con un presupuesto bajo). ¿Quieres saber qué hacer un fin de semana en Frankfurt? Esto es lo que nosotros hicimos estando de viernes por la tarde a domingo por la tarde en Frankfurt:
Viernes – Llegada
El viernes llegamos más bien tarde, así que no dio tiempo a mucho, dejamos las cosas donde nos alojábamos y nos tomamos un par de cervezas en Sachsenhausen. Sachsenhausen es una zona de Frankfurt con muy buen ambiente y con varios sitios para cervecear.
Sábado – Recorriendo la ciudad
La verdad es que Frankfurt es una ciudad pequeña con todos los monumentos muy cerquita así que en un día es muy fácil ver prácticamente todo. El sábado primero fuimos al Banco Central, tenemos la suerte de tener un conocido que trabaja ahí así que pudimos verlo por dentro, ¡muy buena experiencia. Después de ver el edificio del banco central por dentro, fuimos al mercado de Konstablerwache (¡ojo! solo abre los sábados de 8 a 17), donde tomamos algo de comer y sidra (que no sabía que era típica de esa zona de Alemania y estaba riquísima). Después visitamos la terraza de la Galería Kaufhof donde puedes disfrutar gratuitamente de las vistas o tomarte algo.
Tras está visita dimos un paseo pasando por la plaza de Goethe, el edificio de la ópera antigua, y otro edificio del BCE (el clásico con el símbolo del euro delante). También visitamos el edificio de la bolsa de Alemania que tiene cinco estatuas muy curiosas, una por cada continente.
Finalmente fuimos a la famosa plaza de Romemberg a disfrutar de lo bonita que es y subimos hasta lo alto de la catedral (subir nos costó solo 3€, 1,5€ para estudiantes, y mucho esfuerzo físico). Después de este esfuerzo físico tocaba relajarse a las orillas del Meno, pasando por el famoso puente de hierro.
Domingo – Museo y último paseo
Prácticamente todas las atracciones principales de la ciudad las vimos el sábado, para el domingo únicamente nos dejamos el museo Stadel, al que nos apetecía mucho ir y del que pudimos disfrutar con calma. Y como no, dimos un último paseo a las orillas del Meno (¡cómo me gustan las ciudades con río!).
Este fue el recorrido que hicimos nosotros en un fin de semana en Frankfurt.