Hoy toca echar la vista atrás, hasta nada más y nada menos que diciembre de 2016. Donde una amiga y yo cogimos la mochila y nos fuimos nada más y nada menos que ¡A CUBA!
Lo recuerdo como uno de los mejores viajes que he hecho. Uno de los primeros más de aventura. Una amiga y yo decidimos recorrer Cuba durante una semanita y para exprimirla al máximo alquilamos nuestro propio cochecito y ¡a explorarla!
En esta entrada quiero hacer un poco de memoria y contaros las sensaciones y recuerdos que me llevé de ese viaje, no entraré mucho en detalle ya que hace bastante que fui, las cosas han podido cambiar y además cuando viajé a Cuba todavía no tenía el blog y no apuntaba tanto los detalles, precios etc…
El itinerario
Las ciudades que recorrimos durante esos 7 días fueron: La Habana, Viñales, Varadero y Cienfuegos.
Siendo completamente sincera, si volviera a repetir este viaje tengo claro que quitaría Varadero del recorrido. Por supuesto, es un sitio de playa igual de bonito que el resto de Cuba, pero es mucho más turístico y pierde algo de autenticidad. Por eso disfruté mucho más La Habana, Viñales o Cienfuegos, que igualmente son sitios bastante turísticos pero se alejan de ser la típica zona llena de resorts.



El alojamiento
A grandes rasgos en Cuba tienes dos opciones de alojamiento: los hoteles o las casas particulares. Nosotras nos alojamos siempre en casas particulares (en habitaciones privadas), para dormir en este tipo de casas, podías o reservarlas sobre la marcha o nosotras las reservamos previamente a través de Airbnb.
En todas las casas donde estuvimos nos trataron de lujo y además siempre servían desayuno y cena que era espectacular. Me dio además la sensación que alojándote en casas particulares estás un poco más cerca de la Cuba real, y los anfitriones nos contaron bastantes batallitas y anécdotas.
¿Cómo nos movimos?
Nosotras alquilamos un coche que recogimos en el aeropuerto de La Habana en el minuto uno y nos movimos todo el rato con coche. Las distancias entre los sitios que visitamos no eran especialmente largas y nos permitió exprimir al máximo nuestro tiempo en Cuba.
Hay mucha gente que decide coger conductor privado que te aporta una libertad muy parecida, pero la verdad es que nos las apañamos muy bien con el coche y con Google Maps descargado, así que no nos hizo falta nada más.
También había bastante gente haciendo autostop, todos parecían ser de Cuba aunque justo nosotras recogimos a un chico que resultó ser de España.
Las sensaciones
Del viaje a Cuba me llevé un montón de recuerdos preciosos. La comodidad de estar en un país donde, no solo hablan tu mismo idioma, si no que además son gente súperabierta que no va a tener ningún problema en abrir las puertas de su casa y en contarte un millón de historias.
Una auténtica maravilla de país al que sin duda quiero volver, ya que hubo una gran parte que no pudimos llegar a recorrer.


