Cuando piensas en Benidorm, seguro que se te viene a la mente multitud de gente, playas abarrotadas y rascacielos.
A mí ahora solo me viene a la mente la maravilla de sus fondos marinos.
Escogimos Benidorm como destino para un finde de buceo por su cercanía con Madrid y los precios de sus apartamentos. Pero la realidad es que no esperábamos gran cosa del buceo. ¡Qué equivocados estábamos! Muy cerquita de Benidorm (a menos de 10 minutos de navegación) está la isla de Benidorm, con unos fondos marinos impresionantes y varios puntos de inmersión.



Nosotros fuimos a bucear con Revolution Dive y lo recomendamos 100%, es un centro muy bien organizado y todos los instructores y patrones de barco nos trataron de 10.
Buceamos durante dos días, e hicimos un total de cuatro inmersiones en tres puntos diferentes. En este centro te dan la posibilidad de hacer una sola inmersión si no te animas a hacer doble como hicimos nosotros. Los puntos a los que fuimos nosotros fueron: Los arcos (esta fue la inmersión que repetimos), Punta Garbí y El embarcadero.
La realidad es que las tres inmersiones fueron como estar dentro de un acuario, llenas de vida. Vimos morenas, rayas, barracudas y ¡hasta un pulpo! Aunque mi favorita fue la de Los Arcos, que a mitad de la inmersión te metías entre unos arcos y tenía unos paisajes submarinos increíbles.



Todas ellas fueron inmersiones tranquilas y disfrutonas, el agua estaba como un plato y no tenía nada de corriente. Además fuimos en octubre y estaba a unos apetecibles 24 grados.
Desde luego Benidorm es un destino que no tenía contemplado para buceo pero después de esta experiencia entra dentro de mis opciones para bucear siempre que pueda hacerme una escapada.